El algortarra Jokin San José se ha convertido en todo un referente para los amantes de la gastronomía en Bizkaia.

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A través de su cuenta Mi_Top_Burgers recomienda todo tipo de restaurantes en los que disfrutar de las mejores hamburguesas del territorio. Tal ha sido su éxito, que ha dejado de lado su trabajo como profesor de dibujo artístico y técnico para centrarse en su pasión.

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Las hamburguesas han sufrido una gran transformación en los últimos años. ¿Entiende a aquellos que las siguen viendo como un plato sencillo y no están de acuerdo con los precios que tienen hoy en día?

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Yo lo entiendo. A mi me pasó algo parecido. Vi mucha diferencia cuando empezaron a subir el nivel. Que los precios crezcan también lo entiendo, porque al final pagas por la calidad y la elaboración que el producto requiere. En mi opinión, la clave de una buena hamburguesa es en un 90% utilizar una carne de calidad. Hoy en día llevan cortes específicos: chuletero, de pecho, falda, incluso de picaña…También requieren maduraciones e incluso porcentajes de grasa específicos.

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También han avanzado en la elaboración de lo que acompaña a esa carne de calidad.

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Claro. Los panes, por ejemplo, son todos de obrador. No son de aquellos que muerdes y dejas sangre de los dientes. También contienen nuevas salsas e ideas culinarias revolucionarias. Sigue habiendo hamburguesas batalleras, porque son un clásico de los 70 y 80 y aún hay gente que las consume.

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Pero luego lo comparas con la carne de hoy en día y existe una diferencia. Nunca he probado una hamburguesa que no me gustara nada, pero ahora el nivel está muy alto.

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Ya ronda los 50.000 seguidores en Instagram. ¿Se puede vivir de las redes sociales? 

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Sí que se puede aunque con mucho esfuerzo, dedicación e investigación. Yo era profesor de secundaria de dibujo artístico y técnico pero me cogí una excedencia en junio para dedicarme íntegramente a esto.

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Yo salía de trabajar de profesor y me enfocaba en mis redes sociales, era lo que me motivaba. Cada vídeo que publico tiene una media de 3 horas de trabajo. Además hay que estar siempre innovando, porque el algoritmo de Instagram va cambiando y no puedes seguir haciendo lo mismo que hace unos meses. En el fondo estoy todo el día trabajando.

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En sus vídeos muestra un estilo muy personal, marcado por el humor y la cercanía. ¿Cree que es una de las razones de su éxito?

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Yo sé que a la gente en realidad no le importo yo. Quieren un buen sitio para comer. Pero creo que de esta manera les puede resultar más agradable consumir mi contenido: con ese tono, esos colores, ese humor…

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También hay gente que odia cómo lo hago. No les gusta mi voz ni que hable tan rápido, pero no me importa. Hay más gente a la que le gusta y sobre todo, lo importante es que a mí me encanta lo que hago.

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Se ha convertido en todo un referente entre los influencers gastronómicos. Empezó con las hamburguesas pero cada vez va llegando a más productos. ¿Cuál es el techo de Mi top Burgers?

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Mi idea es centrarme en la comida. Lo que más me gusta es comer y poder documentarlo. Es verdad que a veces no me apetece y no lo grabo. El otro día por ejemplo fue mi cumple y no publiqué nada. El objetivo es intentar vivir dignamente de esto y sobre todo, ayudar a los restaurantes porque al final es un gran impulso para ellos.

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¿Acude usted a los restaurantes o son ellos los que se ponen en contacto?

Siempre son ellos los que se ponen en contacto. Lo que más me gusta de mi trabajo es cuando una o dos semanas después de publicar un vídeo, el propietario del negocio me escribe para agradecerme la gran repercusión que ha tenido en sus ventas.

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El trabajo de profesor es bonito pero es muy poco agradecido. Siempre estás batallando, evitando que los alumnos se peleen entre ellos y los frutos de tu esfuerzo no se pueden cuantificar. Aquí, aunque también tengo haters que me insultan y amenazan, me quedo con el poder ayudar a otros para que su negocio vaya mejor.

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Este verano hemos presenciado el éxito de The Champions Burger en Barakaldo. ¿Cómo lo vivió?

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Fue una experiencia muy buena. Es verdad que la gente se quejaba por el precio de las hamburguesas pero no se dan cuenta de que están pagando por un producto que lleva mucha elaboración y que está cocinado con unos ingredientes de calidad. También fue importante saber ir a las horas adecuadas porque si ibas en el horario de comidas habituales había muchas colas. Intenté ir a horas intermedias.

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¿Viendo la gran afluencia de personas que acudió este año, cree que se podría buscar un recinto más grande para la siguiente edición?

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Ojalá el año que viene se celebre en San Mamés. Sería una salvajada. Yo creo que este año no se ha celebrado allí porque no se le ha dado la importancia que tiene al ser un evento de hamburguesas. Pero visto el éxito que ha tenido creo que el año que viene puede celebrarse en la Catedral.

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En el resto de ciudades se celebra en grandes estadios, como en Donostia (Anoeta) o en Valencia (Mestalla). Es una pasada vivir esa experiencia dentro de un estadio. Comer una hamburguesa viendo las luces y las gradas, sobre el césped.

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A pesar de que la hamburguesa no pueda parecer un alimento saludable, usted es un declarado amante del deporte. ¿No está reñido? 

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Yo recomiendo siempre hacer deporte. Comas o no hamburguesas, el deporte es salud y es vida. Yo dos veces por semana como lo que quiero pero luego hago deporte, sobre todo de fuerza, que creo que es lo mejor para quemar calorías. Esas hamburguesas son después un aliciente para entrenar más fuerte.

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Últimamente ha sido polémico el lanzamiento de la hamburguesa del chef Dabiz Muñoz en una cadena de comida rápida. ¿Cree que tienen cabida los grandes cocineros en este tipo de restaurantes? 

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Sinceramente creo que la de Dabiz Muñoz nunca podrá ser top porque la carne no es de máxima calidad. El pan sí que es diferente, la salsa también, pero nunca podrá ser gourmet. Creo que la hamburguesa es mejor cuanto más simple es. Lo más importante es una carne de primera calidad, un buen queso, una salsa y algún ingrediente que marque la diferencia.

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